Los Duendes y el Zapatero es un encantador cuento de los Hermanos Grimm publicado en 1812. Esta historia narra cómo unos pequeños duendes ayudan misteriosamente a un zapatero pobre, trabajando durante la noche para confeccionar los zapatos más hermosos. Es un relato sobre la gratitud, la bondad y la recompensa al trabajo honesto. Con su atmósfera mágica y su mensaje esperanzador, este cuento ha sido uno de los favoritos de los niños durante más de dos siglos.
Cuento de Los Duendes y el Zapatero
Había una vez un zapatero que, sin culpa suya, se había vuelto tan pobre que solo le quedaba cuero para hacer un par de zapatos. Cortó el cuero por la noche, pensando coser los zapatos a la mañana siguiente, y como tenía la conciencia tranquila, se acostó y se durmió apaciblemente.
Por la mañana, después de rezar sus oraciones, se sentó a trabajar, pero encontró los zapatos ya terminados sobre la mesa. Estaba tan asombrado que no sabía qué pensar. Tomó los zapatos en sus manos para examinarlos mejor: estaban tan bien hechos que no había una sola puntada fuera de lugar. Era un trabajo perfecto, una obra maestra del oficio de zapatero.
Ese mismo día entró un cliente en la tienda. Los zapatos le gustaron tanto que pagó más de lo habitual por ellos. Con ese dinero, el zapatero pudo comprar cuero para dos pares de zapatos.
Los cortó por la noche y a la mañana siguiente se dispuso a trabajar con renovadas fuerzas. Pero no tuvo necesidad de hacerlo, pues cuando se levantó, los zapatos ya estaban terminados. Y de nuevo eran perfectos.
No le faltaron compradores que pagaron suficiente dinero para que pudiera comprar cuero para cuatro pares de zapatos.
A la mañana siguiente, encontró los cuatro pares terminados. Y así continuó: lo que cortaba por la noche, estaba hecho por la mañana. Pronto dejó de ser pobre y se convirtió en un hombre próspero.
Una noche, poco antes de Navidad, después de cortar el cuero, el zapatero dijo a su esposa:
—¿Qué te parece si nos quedamos despiertos esta noche para ver quién nos está ayudando tan generosamente?
A la esposa le pareció una buena idea. Encendieron una vela y se escondieron en un rincón de la habitación, detrás de unos abrigos colgados, y esperaron.
A medianoche, llegaron dos pequeños duendes desnudos. Se sentaron a la mesa del zapatero, tomaron el cuero cortado y comenzaron a trabajar. Sus pequeños dedos cosían, golpeaban y clavaban con tal rapidez y habilidad que el zapatero no podía apartar los ojos de asombro. Los duendes no pararon hasta que todo estuvo terminado. Entonces saltaron de la mesa y desaparecieron.
A la mañana siguiente, la esposa dijo:
—Los pequeños duendes nos han hecho ricos. Debemos mostrarles nuestra gratitud. Pobrecitos, van desnudos y deben pasar mucho frío. ¿Sabes qué? Les coseré camisitas, chaquetas, pantalones y chalecos, y les tejeré un par de medias a cada uno. Y tú hazles un par de zapatitos.
El zapatero estuvo completamente de acuerdo. Por la noche, cuando todo estuvo listo, pusieron los regalos sobre la mesa en lugar del cuero cortado, y se escondieron para ver qué hacían los duendes.
A medianoche, los duendes llegaron saltando, listos para ponerse a trabajar. Pero en lugar del cuero, encontraron las preciosas ropitas. Al principio se sorprendieron, pero luego mostraron una gran alegría. Se vistieron con rapidez, alisándose la ropa y cantando:
—¡Qué elegantes y guapos estamos! ¡Ya no somos zapateros, sino caballeros!
Saltaron y bailaron, brincando sobre sillas y mesas. Finalmente, bailando, salieron por la puerta.
Nunca más volvieron, pero al zapatero le fue bien desde entonces. Todo lo que emprendía le salía bien, y vivió feliz y próspero el resto de sus días.
— Fin —
Moraleja de Los Duendes y el Zapatero
Este encantador cuento de los Hermanos Grimm nos enseña valiosas lecciones:
La gratitud debe expresarse. El zapatero y su esposa no solo sintieron agradecimiento, sino que lo demostraron con acciones concretas: confeccionaron ropa para los duendes.
La bondad es recompensada. El zapatero era un hombre honesto y trabajador que cayó en la pobreza sin culpa suya. Su buena actitud fue recompensada con ayuda inesperada.
Un regalo dado con amor tiene gran valor. Los duendes se alegraron inmensamente con la ropa, no por su valor material, sino porque representaba el cariño y agradecimiento del zapatero y su esposa.
El trabajo honesto merece respeto. Los duendes trabajaban con dedicación y perfección, y el zapatero reconoció y valoró ese esfuerzo.
Versión Corta de Los Duendes y el Zapatero
Un zapatero tan pobre que solo le queda cuero para un par de zapatos lo corta por la noche para trabajar al día siguiente. Pero al despertar, encuentra los zapatos ya hechos y perfectos. Los vende bien y compra más cuero. Cada noche ocurre lo mismo: corta el cuero y por la mañana los zapatos están listos. Así prospera. Una noche de Navidad, él y su esposa se esconden para ver quién los ayuda. Descubren a dos duendecillos desnudos que trabajan. Para agradecerles, les confeccionan ropita y zapatitos. Cuando los duendes encuentran los regalos, bailan de alegría, se visten y se van para siempre. El zapatero vivió próspero el resto de sus días.
Datos Curiosos del Cuento
- Publicación: Los Hermanos Grimm incluyeron este cuento en su colección “Cuentos de la infancia y del hogar” publicada en 1812.
- Tres historias: En la versión original de los Grimm, este cuento tiene tres partes. La más conocida es la primera, sobre el zapatero. Las otras dos tratan sobre una sirvienta y una madre con un niño que también reciben ayuda de duendes.
- Los duendes en el folklore: En la tradición germánica, los duendes (Wichtelmänner o Heinzelmännchen) eran espíritus del hogar que ayudaban en las tareas domésticas, pero desaparecían si eran vistos o si recibían ropa.
- Simbolismo de la ropa: En muchas tradiciones europeas, regalar ropa a un espíritu del hogar lo libera de su servicio. Es similar a Dobby en Harry Potter, inspirado en estas leyendas.
- Época navideña: El cuento está ambientado cerca de Navidad, conectándolo con la tradición de dar y recibir regalos.
- Adaptaciones: El cuento ha sido adaptado en películas, obras de teatro y especiales navideños innumerables veces.
Preguntas Frecuentes
- ¿Quién escribió Los Duendes y el Zapatero? El cuento fue recopilado por los Hermanos Grimm (Jacob y Wilhelm) y publicado en 1812 como parte de su famosa colección de cuentos populares alemanes.
- ¿Cuál es la moraleja de Los Duendes y el Zapatero? El cuento enseña sobre la gratitud, la importancia de reconocer la ayuda recibida, y cómo la bondad y el trabajo honesto son recompensados.
- ¿Por qué los duendes se fueron después de recibir la ropa? En el folklore europeo, se creía que los espíritus del hogar quedaban liberados de su servicio cuando recibían ropa como regalo. Los duendes, felices con su nueva vestimenta, se consideraron “caballeros” y ya no necesitaban trabajar.
- ¿Por qué los duendes estaban desnudos? En la tradición de los espíritus del hogar germánicos, estos seres solían aparecer desnudos o con harapos. Su desnudez simbolizaba su humildad y servicio desinteresado.
- ¿Es un buen cuento para Navidad? Sí, es perfecto para la temporada navideña. La historia está ambientada cerca de Navidad y su mensaje sobre la gratitud y los regalos dados con amor encaja perfectamente con el espíritu de la época.
- ¿Hay más partes en el cuento original? Sí, en la versión completa de los Grimm hay tres historias cortas sobre duendes. La del zapatero es la primera y más famosa.
Otros cuentos de los Hermanos Grimm:
- Hansel y Gretel
- Blancanieves
- Cenicienta
- Los Músicos de Bremen
- Rumpelstiltskin
Cuentos con personajes pequeños:
- Pulgarcita (Andersen)
- Pulgarcito (Perrault)
Cuentos sobre trabajo y recompensa:
- La Cigarra y la Hormiga
- Los Tres Cerditos